domingo, julio 02, 2006

"Babas de caracol", Aurea Editores, 2006

"Babas de caracol" es el título de mi última novela. La voz narradora es la de Pedro Ribera, un escritor de éxito que se encuentra sufriendo un período de crisis de creatividad. Saldrá de su letargo por sorpresa, de la mano de una difunta, Berta Astomi, que en su testamento le ha dejado un legado de casi un millón de euros bajo la condición de que en el plazo de dos años escriba una novela inspirada en su biografía. El resultado será "Babas de caracol", una novela que toma la forma de crónica de la investigación que Perdo efectua. Conforme vaya descubriendo los misterios de esta mujer, los motivos que le llevaron a testar de manera tan sofisticada, no podrá evitar que la influencia fantasmal de Berta planee sobre su vida. La historia de Berta es atroz, condicionada por la época que le tocó vivir, el entorno familiar y su carácter orgulloso e inflexible. La novela es una muestra más de la condición humana. Berta es víctima, y también verdugo. Su incapacidad para perdonar y hacerse perdonar la conducirá a una soledad absoluta, un precio demasiado alto que ninguna ofensa merece.

12 comentarios:

María García-Lliberós dijo...

¿Qué piensas del personaje de Juan Nogales, el marido de Berta, capaz de cambiar de vida para conseguir que crean su calumnia? Es el retrato de un auténtico perverso, constante en su malicia hasta la muerte.

Anónimo dijo...

He leído la última novela de María, Babas de caracol, y desde luego que deja rastro, un cúmulo de sentimientos, de rabia, de ver lo injusta que ha sido la vida para las mujeres, y lo malo que es el orgullo, desde luego hay que tenerlo, pero a veces hay que valorar lo que conlleva. Me ha resultado una novela entretenida y didáctica para la gente joven que no ha conocido la época de la represión. Enhorabuena. T

Anónimo dijo...

Leí "Babas de caracol" hace ya más de un mes, y me sorprendo recordando su argumento todavía. Me interesó mucho el aspecto político de la novela. Desconocía, por ejemplo, la bárbara Ley de Franco eliminando el divorcio y sus posibles consecuencias. La literatura debería sacar estas cosas para que la gente se entere de lo que es una dictadura. Me gustó, por otra parte, la relación de Pedro Rivera, el personaje escritor, con su perro, llena de ternura y sensatez. Me encantaría acudir a alguna tertulia sobre esta novela que tiene muchas caras para la reflexión. Si se organiza, aviarme. Firma: el lector disfrazado.

Anónimo dijo...

Más que un comentario hago una pregunta: ¿está basada la novela en hechos reales? Conocí un caso de un hombre que pasó la posguerra escondido en una despensa y sólo se atrevió a vlver a salir a la calle diez años después de terminada la guerra civil.
Firmado: Enrique, de Salamanca

Anónimo dijo...

"Babas de Caracol" es una novela envolvente que como bien decía un participante hay que leerla despacio para captar su maravilloso entramado y familiarizarse con unos personajes tan complejos como apasionates. A mí más que Juan Nogales y que ningún otro quién me sorprende es Berta, el orgullo personificado que lleva a actuaciones maquiavélicas. Es una mujer malvada y amargada a la que tras conocer su historia uno siente compasión y sobre todo desearía haber estado allí para aconsejarla y hacerle tragar su orgullo. Cristóbal es el gran truhan de la trama, su ingenuidad y su atrevimiento no conocen fin y por ello sorprende. Poderoso caballero es don dinero!!
Qué decir de la deliciosa historia de amor entre el protagonista y Eva, que permite al lector descansar su mente de las tensiones de los Astomi para luego retomarlas con una sonrisa plácida. En fin, "Babas de Caracol", deja realmente un rastro en la mente del lector, un rastro gratificante, ya que tras las multiples desgracias y sinsabores, Berta acaba cocinandonos una exquisita sepia con ñoras y Pedro Rivera consigue su recompensa y su felicidad.

María García-Lliberós dijo...

Contestación a Enrique:
la novela está inspirada en algunos hechos que pudieron suceder como los cuento teniendo en cuenta las circunstancias históricas. Son hechos -el secuestro de los niños, el suicidio de Salvador, la anulación del divorcio por la Ley de Franco, etc....- que han ocurrido y que me han llegado de forma oral y me han servido para ir conformando el argumento entre una familia y una sere de personajes imaginados por completo. Ya lo dije en una entrevista, sólo Áticus, el perro de Pedro Rivera es real, porque me he inspirado en mi perro.
Gracias, Enrique, de Salamanca por tu interés.

Anónimo dijo...

"Babas de Caracol" es una magnífica novela. La mejor, sin duda de su autora, aunque yo sigo prendado todavía de "El juego de los espejos", otra novela suya formidable. "Babas..." es una historia fascinante y está escrita con un lenguaje muy preciso y elaborado, lo que denota la madurez creativa de su autora. Esta novela, ante todo, le hace a uno pensar en los clásicos, en Henry James y autores así. Quiero resaltar también el incisivo sentido del humor que brota a menudo de sus páginas. Los personajes están muy bien diseñados. Son creíbles y a menudo conmovedores. Echo de menos que no se le dedicara un capítulo completo a Pedro Nogales, en el que pudiéramos conocer su punto de vista, su versión sobre los echos. Pero quisá entonces se habría humanizado a ojos del lector y eso hubiera sido peligroso y contraproducente y hubiera afectado al resultado. Doña Berta no me parece tan terrible ni tan mal. La entiendo muy bien. Entiendo que no quisiera saber nada de todos los parásitos que únicamente querían acercarse a ella por su dinero, pues así es la naturaleza humana. El capítulo de las ñoras es el mejor y coincido con otros lectores en ese asunto. Yo no he cocinado ese plato todavía y me pregunto si no le iría bien un poco de ajo... ¿qué me dice de esto su autora?

Firmado: Un lector compulsivo

María García-Lliberós dijo...

Me encanta que "un lector compulsivo" recuerde "El juego de los espejos", mi primera novela larga que recuerdo con mucho cariño. Aunque diferente por completo a "Babas de caracol" me parece, ahora, que las protagonistas femeninas, Violeta y Berta, tienen en común un fuerte carácter y mucha capacidad de hecer daño y de hacerse daño.
No te aconsejo que añadas ajo a la receta de sepia con ñoras. Tal como la cocina Berta (que es como yo la hago), sale muy buena. Se me ocurrió precisamente en la cocina como una buena forma de penetrar en el interior de Berta. Es cierto que las mujeres (supongo que también aquellos hombres que cocinen)reflexionamos mucho mientras preparamos la comida. Al igual que escribir, es una actividad silenciosa y solitaria.Yo planeo capítulos o invento personajes mientras pico cebolla o preparo el sofrito de la paella. El capitulo "sepia con ñoras" fue el que más me costó de escribir y, desde luego, es el que más ha gustado, por las opiniones que me van llegando.
Gracias por tus comentarios, "lector compulsivo", tan alentadores y perdona que haya tardado en contestar pero acabo de volver de un viaje y no he podido hacerlo hasta ahora.

Anónimo dijo...

BABAS DE CARACOL – María García-Lliberós - .

Caramba, María, ¡qué libro has escrito!.
Cuando empecé a leerlo, y en la página 16 tropecé con la descripción de la casa y del paisaje de Bétera, pensé que sería un libro amable, algo parecido a las novelas de R. Pilcher y sus paisajes de Cornualles, que me relajan tanto…Y nada, de eso nada: tu libro hace sufrir y mucho, aunque lo he leído de un tirón, porque tu libro “engancha”.

El ambiente que nos describes, es cambiante, como las personas y es el transcurrir del tiempo el que le da ese movimiento. Además es real, yo he conocido y he sufrido ambientes parecidos, propios de esa época, que aún ahora, al recordarlos, no puedo evitar la extrañeza, ¿cómo pudieron crearlos y mantenerlos personas que habían sufrido persecución y miedo?…
Describes Villacesu y Valencia con detalle como Blasco Ibáñez, y eso está bien… me gusta que me ayuden imaginar.

Nos cuentas dos historias paralelas:
-la de Berta.
-y la de Pedro Ribera, el escritor.

La primera es muy dura, no hay nadie bueno, ni siquiera el abogado Antonio González
La segunda es más entrañable, sobre todo en las páginas 248 y 249. Acaba bien, pude respirar hondo y volver a creer en la humanidad.

El personaje principal es Berta. Berta siempre víctima:
-engañada por Juan.
-humillada por su familia.
-despojada de sus hijos por su marido, con malas artes.
Aunque Berta inteligente, que supo urdir una trama para que, al menos después de su muerte, su hijo supiera la verdad y al mismo tiempo recibiera la herencia que su abuelo le había escamoteado.

Los otros personajes:
-Juan, el marido, de mente diabólica, ¿cómo se puede ser tan malo?.
-don Ramón, doña Clara, sus padres, y sus hermanas…no hay por donde
cogerlos.
-Alejandro y Salvador sus hijos, desconocedores de la verdad…
Sobre todos ellos pululan sentimientos, emociones y situaciones muy fuertes, tales como: la ambición, el amor al dinero, la vanidad, la enfermedad, el deseo de venganza…

Los momentos más fuertes me han parecido:
-cuando Berta enferma, las distintas reacciones de los que le rodean, sobre
todo la de su marido.
-cuando le quitan los hijos.

He subrayado algunas frases, que por diferentes motivos, me han hecho reflexionar:
-“¿Hay algo más estúpido que una buena persona estúpida?”.
-“…prefiero los recorridos largos con pasos cortos.”
-“El necio sólo conoce el mal cuando está hecho,”
-“La memoria…puedes aligerarla echando: rencores, desconfianzas,
decepciones, aquello que oscurece el ánimo y entorpece la felicidad.
-“La sombra de los muertos es a veces alargada.”
-“Lo malo es que cuando llegas a sabio te sorprende la muerte.”
Y ésta que resume los sentimientos de Berta hacia Juan: “Querría ver a Cristóbal en la cárcel porque estaría, por fin, encarcelando a Juan.”

María, es un libro que me ha tenido en tensión durante toda su lectura, sin dejar que decayera mi atención, es un libro para debatir, ¿puede ser real lo que narras?… Espero con impaciencia el día trece.

Anónimo dijo...

He leído Babas de Caracol. Mi opinión es que es una magnífica novela, incluso me la imagino llevada al cine, e interpretando el papel de Berta, a Carmen Maura, Ana Belén o Victoria Abril.
Enhorabuena por tan buen libro!

Anónimo dijo...

No hay forma de encontrar tu libro. Para cuando una nueva edición?

laura

María García-Lliberós dijo...

El libro está agotado desde el pasado verano y te avisaré cuando vuelva a estar disponible.
Pero si te interesa leer algo mío, te aconsejo que empieces por "Equívocos" (Ed. Algaida), que se puede conseguir aún previa solicitud al distribuidor (se editó en 2002)o "Como ángeles en un burdel", de la misma editorial.